Pigu volvió a la victoria

Cuando un jugador de la categoría de Andrés Romero pasa mucho tiempo sin victorias se nota mucho. Pigu, uno de los mejores jugadores argentinos de los últimos tiempos, con victorias en Europa y Estados Unidos, y actuaciones para el recuerdo, como aquella de Carnoustie 2007, atravesaba desde hace tiempo una sequía de títulos, sobre todo en el Tour Profesional de Golf Argentino, donde no ganaba desde fines de 2011, cuando conquistó el Gran Premio Pingüinos. Sin embargo, todo llega para un jugador del potencial del tucumano, y este domingo, en el Carlos Franco Invitational Copa Samsung, le tocó redimirse y volver a festejar en grande.
Romero sabía que tenía una misión complicada en el campo ubicado en las afueras de Asunción, porque partía a cinco golpes del líder, Maxi Godoy, que hasta allí había sido pura solidez. Pero el profesional formado en el Jockey Club de Tucumán, que a partir de este lunes será anfitrión de la próxima cita del TPGA, justamente en el campo de Yerba Buena, hizo su trabajo, anotó un 69, y sacó provecho del desmoronamiento del líder de los primeros 54 hoyos.
Godoy tuvo un día negro, nada de lo que venía mostrando en el certamen y en los torneos previos (se adjudicó el Angel Cabrera Tour con dos victorias en seis etapas disputadas) le salió en la última vuelta. Hizo 38 de ida, con tres bogeys y un birdie, y terminó de caerse en los primeros hoyos de la vuelta, con bogeys en el 10, 11 y 12.
Jugando a su lado, Pigu concretó su recorrido con su estilo. Una vuelta plagada de altibajos, que sin embargo terminó con más aciertos que errores para un -3 que le alcanzó con lo justo para superar al “dueño” del torneo, Carlos Franco, que estuvo a punto de dar el golpe con un gran cierre de 67.

Romero arrancó con bogey, pareció encenderse con bogeys en el 4 y 5 y 6, pero enseguida pagó sus errores con dos bogeys seguidos (7 y 8). Pero si la ida había sido cambiante para Pigu, había que ver su producción en la recta final del torneo: bogey en el 11, birdies en el 12 y 13, águila en el 14, y birdie en el 15. Y cuando se encaminaba a una victoria sin sobresaltos, otra vez aparecieron los errores, cerró con doble bogey en el hoyo 72, y estuvo cerca de darle la chance del desempate a Carlos Franco.
Más allá de las formas, lo cierto es que Andrés Romero volvió a llevarse el título en un torneo de nuestro tour después de tres años, una excelente noticia para un jugador que se alimenta de los éxitos y apoya al TPGA con su presencia permanente en los torneos.